POLICIA DE INVESTIGACIONES EN LA MIRA POR PROSTITUCION INFANTIL

Julio Ibañez Burgos, jefe de la Quinta Región Policial Valparaíso;

Sorpresivo llamado a retiro de cuatro altos mandos en la PDI Su llamado a retiro coincide con el desarrollo de la investigación interna en el caso de la red de prostitución infantil, denunciada por el programa “Contacto”, la semana pasada.

SANTIAGO, junio 17.- La Policía de Investigaciones llamó a retiro a cuatro altos oficiales de la institución, en lo que sería los primeros resultados de la investigación de la presunta red de prostitución que involucraba a detectives de la Región de Valparaíso.

Mediante un comunicado emitido por la Jefatura Nacional de Asuntos Públicos de la Policía Civil, se informó que el director general de la institución, Arturo Herrera Verdugo, dispuso "el retiro absoluto de la institución" de los prefectos inspectores Héctor Soto Candia, Jefe de la Inspectoría General; de los prefectos Víctor Avellaira Torres, jefe de la Región Policial Metropolitana de Santiago; y del prefecto Paulo Portorelli Palacios, jefe de la Prefectura Provincial Valparaíso.

Aunque se desconoce los motivos oficiales de la salida de la PDI, su llamado a retiro coincide con el desarrollo de la investigación interna en el caso de la red de prostitución infantil denunciada por el programa “Contacto” la semana pasada.

Según el reportaje de Contacto, el nexo entre las jóvenes y los funcionarios de la PDI era Carlos Parra Ruz, de 56 años, dueño del Hotel Lousiana y del Cabaret Pandemónium, lugares donde varias menores de edad prestaban servicios sexuales a detectives, a cambio de protección.

El programa de Canal 13 denunció que los detectives Jorge Gallardo Raposo, Claudio Cortés Benítez, Sergio Jarpa Astudillo, Edgardo Uribe Toro, y Alejandro Puga Herman, habrían sido clientes del hotel y del cabaret donde varias adolescentes prestaban servicios sexuales, y que ellos tenían conocimiento de que eran menores de edad.

Además, hubo testimonios que apuntaron a que Parra incluso llevaba menores de edad a los cuarteles "a pedido" para hacer shows, consumir droga y tener sexo con los policías.

El reportaje, además, mostró el caso de una de las jóvenes -hoy de 18 años- quien denunció que en marzo fue interceptada por un vehículo y golpeada como advertencia para que no hiciera denuncias.

La joven y su familia solicitó a la justicia porteña protección, recurso que fue rechazado. La Corte Suprema, sin embargo, revocó la decisión y la otorgó.

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